"No es suficiente combatir la ignorancia de los ignorantes. Es preciso también, y en primer lugar, combatir la ignorancia de los que saben muchas cosas, incluso de los que creen saberlo todo".
Edgar Faure. Político, escritor y ensayista francés.
Esta noche he tenido un momento de reflexión, viendo, bueno, más bien leyendo, hasta que punto la ignorancia en un tema concreto, puede llevarte a expresar o decir cosas, que si bien pueden manifestarse como una opinión personal, dichas palabras no dejan de reflejar el desconocimiento profundo que se tiene sobre ese tema concreto.
Cuando eso ocurre, puede pasar que tengas delante alguien que no tiene ni pajolera idea de que va el tema, que está interesado en saber y aprender porque tiene curiosidad, porque lo que ha visto o leído ha despertado en esa persona el deseo de descubrir, identificar, ponerle nombre a lo que siente o simplemente curiosidad del que desea saber por saber, porque dicen que el saber no ocupa lugar y hay personas que sin identificarse con algo les gusta tener un conocimiento sobre ese tema y muchos temas, vamos, mentes inquietas. Cuando eso ocurre, esas esponjas absorbe datos, retienen la información que les llega dando lugar a la adquisición de unos conceptos erróneos que para nada son reflejo de las bases consolidadas que definen ese tema.
Creo que cualquier persona que se atreva, que se arriesgue a expresar, afirmar, definir, describir o lo que sea, cualquier concepto o desarrollar cualquier tema, tiene la obligación y el deber de saber de lo que habla, de informarse antes, de no mezclar conceptos, de no llamar a las cosas de un modo equivocado (porque lo llaman amor cuando quieren decir sexo...), en definitiva no confundir al personal, porque es totalmente lícito expresar tu opinión, pero no es correcto ante quien solicita esa información llevarla a la confusión, cuando más tarde esa persona, tras seguir leyendo e investigando, verá por sus propios ojos que aquello que alguien le dijo en su momento no tiene nada que ver con lo que ahora ve y lee, quedando patente que aquello de lo que hablaba era fruto de su más absurda ignorancia.
Como imaginareis, el tema a tratar que me ha llevado a la reflexión, entra dentro de la D/s, pero es indiscutible que esto es aplicable a cualquier otro tema. Y también es evidente que la ignorancia no es mala, sólo que hay que saber reconocerla ante los demás.
"No me avergüenza confesar la ignorancia de lo que no sé". Cicerón. Jurista, político, filósofo, escritor y orador romano.
La ignorancia abunda, mucho más en este mundillo, y hay que aprender a separar la paja del grano... lo bueno es que es fácil porque los ignorantes suelen caer por su propio peso...
ResponderEliminarUn beso ;)
Interesante reflexión amiga! Un placer leerte!
ResponderEliminarBesos azules...
"TODOS SOMOS UNOS IGNORANTES, LO QUE OCURRE ES QUE NO TODOS IGNORAMOS LAS MISMAS COSAS". ALBERT EINSTEIN.
ResponderEliminarHay mucha gente que hablan de cosas que no saben, pero es que no les gusta afirmar que son unos ignorantes.... Pero es que nadie puede saber o conocerlo todo, pero siempre hay lugar y tiempo de ir aprendiendo sobre temas nuevos!!!
Un abrazo Princesa!!!!
Ignorantes hay en todos lados, querida :3
ResponderEliminarYo por ejemplo, para mis últimos escritos (esos que tanto os gustan de lord C y lady K) he tenido que informarme mucho (lo que yo llamo documentación xD) antes de atreverme a redacatar... y ni así estoy segura de lo que estoy escribiendo >.>
Un beso!!
Abundan los ignorantes, los prepotentes, los mentirosos, arrogantes, envidiosos, aprovechados, ilusos, inocentes... y si todos ellos se pueden meter con facilidad en el mismo juego, abierto y público, el resultado puede ser el que mencionas, entre otros muchos.
ResponderEliminarUn beso desde mi Jardín, princesa.
No hay ninguna duda que todos somos ignorantes en muchos temas, yo la primera, y eso no es malo, de ahí a que sea prudente a la hora de expresarme y opinar sobre lo que no estoy segura o desconozco, y jamás de me ocurriría dar lecciones. Pero no ocurre así con todo el mundo...
ResponderEliminarLy, algamarina, Lord, Paty y Rosaida, gracias por colaborar con vuestras opiniones o mensajes en esta entrada fruto de las vueltas que le da una a la cabeza de vez en cuando. No siempre, que me canso...jejeje.
Besos y abrazos.
Lo mejor de mundo sería saber discernir a quien sabe de quien no, pero es algo difícil, sobre todo cuandos se empieza a conocer algo.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho tu reflexión. Un besazo.
Así es shere, es muy difícil cuando empiezas y de echo ocurre lo que yo he podido ver en un "grupo", donde hay personas deseosas de saber, escuchar, aprender y donde se les confunde permanentemente.
ResponderEliminarUn besazo guapa y gracias por pasar.