Él dibujaba un mapa con sus dientes en su cuello, y ella lo observaba.
Él borraba las dudas de su mente con sus brazos, y ella asentía.
Él quitaba sus tristezas desde el lóbulo de la oreja con su lengua, y ella sonreía.
Él borraba las huellas de la soledad recorriendo el camino con sus dedos.
Y ella se entregaba.
Sensual, dulce y con tu toque personal. Princesa Celta.
ResponderEliminarMuy bonito.
Gracias Iralnara. Un beso.
EliminarDelicado, como tú, princesita :)
ResponderEliminarEstá bueno eso de borrar las dudas....
Muasssssssssssssssssssss!
(Me alegra estar cerca nuevamente ^..^)
Y no te despegues mucho...
EliminarUn montón de besos y achuchones.